Fueron 57 las órdenes de allanamientos llevados a cabo en
los barrios, Las Malvinas, Villa Cacho, Gaira, Cerro de las Tres Cruces, Los
Almendros y el Centro Comercial ‘Royal Plaza’.
Fueron tres meses de seguimiento e investigación por parte
un grupo especial de investigadores de la Metropolitana de Santa Marta, quienes
recopilaron todo el material probatorio como videos, interceptación de llamadas
y varias denuncias de ciudadanos que habían sido víctimas de este grupo de
delincuentes, que sirvieron para que las autoridades emitieran las ordenes de
captura contra estos sujetos quienes venían sembrando el terror en la ciudad de
Santa Marta con todo su accionar delictivo.
Fueron 57 las órdenes de allanamientos llevados a cabo en
los barrios, Las Malvinas, Villa Cacho, Gaira, Cerro de las Tres Cruces, Los
Almendros y el Centro Comercial ‘Royal Plaza’, allí fueron capturadas estas 43
personas sobresaliendo sus principales cabecillas como son, Carlos Alberto
Sierra Obregón alias “Tambor” jefe de la Organización, José Villazón, alias
“José Guajiro” segundo al mando y estaría encargado de la logística y de conseguir
el armamento con que se cometerían los hurtos, y en tercer lugar estaría Jhon
Pertuz, alias “Jhon” quien sería el encargado de marcar a las víctimas para
luego hurtarlas y Erick Mercado, alias “Erick” Jefe de pistoleros de la banda
delincuencial.
Alias ‘Tambor’ cabecilla principal, tendría a su mando más
de 50 hombres los cuales estaban distribuidos en las distintas comunas de Santa
Marta, y quien además tendría su centro de operaciones en una vivienda ubicada
en la parte alta del cerro ‘Las Tres Cruces’ que estaba diseñada en forma de
‘Bunker’ y que era vigilado las 24 horas del día para evitar ser detectado por
las autoridades, hasta donde llevaban todos los elementos que hurtaban y además
se repartían las ganancias de todos los robos.
Para llevar a cabo estos operativos y saber de primera mano
la forma y como operaban estos antisociales, varios investigadores provenientes
de la ciudad de Bogotá se infiltraron dentro de esta organización, logrando
obtener toda la información de cada uno de sus integrantes, además de conocer
el sitio desde donde planeaban sus fechorías, y que además servía como sitio de
entrenamiento de jóvenes que eran reclutados por alias ‘Tambor’ quien lo
entrenaba sobre cómo defenderse,
disparar y robar a sus víctimas.
‘Los del Río’, tenían conformada toda una ‘empresa criminal’,
en todo el perímetro urbano de Santa Marta, donde robaban desde vehículos hasta
entidades financieras, pero su accionar delictivo lo centraban principalmente
al hurto de celulares de alta y mediana gama, ya que dichos elementos después
de hurtados iban a parar en diferentes locales comerciales a donde los llevaban
para luego ser puestos a la venta del público, y otras veces eran enviados a
ciudades como Bogotá, Medellín y países como Ecuador, Perú, Argentina y Estados
Unidos.
Dentro de los operativos también fueron allanados varios
locales comerciales ubicados en el centro histórico de esta ciudad, en donde se
tenía conocimiento iban a parar todos los objetos que esta banda delincuencial
se hurtaba, por lo que se iniciaran los trámites correspondientes para que las
autoridades competentes emitan la extinción de dominio de cada uno de ellos, ya
que en el interior de estos se halló una gran cantidad de celulares que
presentaban inconsistencias y algunos figuraban como hurtados.
En los allanamientos fueron incautadas 3 armas de fuego
ilegal, 150 celulares reportados, 121 carcasas para celulares, 30 cartuchos de diferentes calibres, 2
computadores, y la inmovilización de 6
motocicletas y 1 vehículo taxi de servicio público, el cual era utilizado como
fachada y poder movilizarse sin despertar sospecha ante las autoridades.
Modus operandi ‘Los del Río’
“Los del Río” robaban de cuanto objeto de valor se les
cruzara en su camino sin importar si estaba bueno o malo, realizando diariamente entre 4 y 5 atracos en toda la
ciudad de Santa Marta, lo que les generaba ganancias aproximadas a los 4
millones de pesos, y para lograrlo se
movilizaban a bordo de motocicletas de alto cilindraje, acechando a sus
víctimas que por lo general transitaban solas por las calles y en partes
desoladas, a quienes intimidaban con armas de fuego y obligándolas a
entregarles todas sus pertenecías, y en muchas ocasiones las lesionaban cuando
se oponían al atraco.
Así mismo durante los fines de semana se integraban en
fiestas y discotecas de altos estratos sociales, en donde individualizaban a
sus víctimas a quienes observaban detenidamente para ver que traían puesto, y
ya en horas de la madrugada cuando se iban, les hurtaban joyas, relojes y todo elemento
de valor que en ese momento llevaban.
En cuanto a hurtos a entidades financieras y locales
comerciales por lo general operaban entre varios cómplices, donde varios de
ellos se quedaban en la parte de afuera de estos locales con el fin de alertar sobre
la presencia de las autoridades, mientras que otro grupo se encarga de saquear
todo el establecimiento y de robar a todas las personas que estuvieran allí
presentes.
Con la captura y desarticulación de esta banda
delincuencial, que es considerado el operativo más grande durante los últimos
años realizados en la ciudad de Santa Marta contra el flagelo del hurto en
todas sus modalidades, se logra atacar de manera directa este delito que venía
afectando la economía y principalmente el turismo de esta ciudad, ya que muchos
extranjeros fueron víctimas de estos sujetos, y hoy estamos dando un parte de
tranquilidad a toda la ciudadanía al colocar a buen recaudo de las autoridades
competentes estos delincuentes que tanto daño le hacían a toda comunidad samaria.
Estos son sindicados por los delitos de hurto, concierto
para delinquir, receptación y tráfico, fabricación o porte de armas de fuego y
municiones.